Todo parte de un orden y una estructura, aunque existen las individualidades se debe tratar de generar un colectivo que permita llevar a flote este barco en el cual navegan las historias. Si las sirenas no funcionaran como un colectivo, no podrán obtener su objetivo de cautivar a los marineros con su canto, entrarian en choques y contradicciones que no favorecen su propósito. Por lo tanto, dentro de las Narrativas transmedia debe plantearse un orden y hoja de ruta que permita definir el horizonte de la historia de forma organizada y coherente. Es necesario adentrarnos a la construcción de relato debido a que dentro del mundo transmedia se deben cumplir ciertas características que faciliten su expansión por parte de los usuarios ya que son estos quienes mantienen con vida el relato. (Scolari, 2013).

Ahora para la construcción del mundo narrativo se deben tener en cuenta varios aspectos, la estructura debe ser hasta cierto punto compleja y lo suficientemente grande como para que el consumidor es decir, el tripulante pueda explorarla. Si la historia no permite el juego con el usuario (lector/ espectador), no lo podrá cautivar, por ello es necesario delimitarla para tener una estructura, esto sin llegar a cohibir o erradicar las propuestas del espectador. Los tres principales componentes son: el lugar, el tiempo y los personajes (y sus relaciones). (Smith, como se citó en Scolari, 2013).

De estos componentes se debe tener en cuenta que la ubicación geográfica sea lo suficientemente clara, es decir, especificar las locaciones o lugares por los cuales transitan e interactúan los personajes y así tener un control del universo sin que se generen saltos o contradicciones no deseados, pero, no es solo importante el lugar, si no también lo que allí ocurre, esto permite seducir a través de las palabras al espectador, si los personajes no tienen conflictos, enfrentamientos, alianzas, ataques, defensas entre otras situaciones que dinamicen el relato, no se dinamiza la historia y tampoco permite su expansión. 

Existen 4 fases que contribuyen a la creación de los relatos, estas etapas llevan por nombre: La adición basada en la mencionada expansión donde se incorporan elementos; la omisión que por el contrario busca quitar elementos del relato; la transposición, este modifica la organización de los elementos y finalmente la permutación que pretende sustituir un componente por otro.  (Scolari, 2013) 

Entonces no es solo el hecho de crear una historia, se deben plantear diversos escenarios y en muchas ocasiones escuchar diversas opiniones en las cuales se pueda proponer una narrativa transmedia. Tal vez sea un poco confusa la información que acabas de leer pero te aseguramos puedes encontrar ejemplos sobre narrativas transmedia, han estado presentes en tu entorno, puede que hasta tu hayas hecho parte de alguna sin que lo notaras ¿Quieres saber por qué? sigue leyendo.